Lo que nosotros vivimos fue algo muy especial, la familia de Yulises nos habia invitado a «su naadam» y tras bañarnos en en río, para allí que fuimos, todos los mongoles de los alrededores habían desmontado sus gers y los estaban montando en medio de la estepa, había caballos, corderos, camiones, más de 50 Gers, un mini escenario y mucho más.
Allí nos acogieron como si fuéramos de la familia, bien de té, vodka, comida y muchos saludos…